Una sensación de desconcierto se ha apoderado de algunos de los casi 75.000 opositores que se han presentado a los exámenes de Correos celebrados este domingo, a los que han acudido casi el 50% de las 150.000 personas que se habían inscrito en la convocatoria. Sin embargo, algunos de estos opositores aseguran estar tan sorprendidos con las preguntas del examen, que de momento no se atreven a corregirlo para comprobar su nota.
Es el caso de María José Lao, de 32 años, que asegura que “no era un examen esperado, había una serie de preguntas que no se con qué temario se corresponden” afirma la opositora, que asegura que tras contrastarlo con otros compañeros que también se han presentado al examen “nadie sabe de dónde salían estas preguntas” por lo que explica que la sensación tras el examen es “agridulce. No quiero ni corregir el examen, no quiero saber cuánto he sacado y estar con la incertidumbre que eso me pueda generar”, explica María José, que asegura que “es un malestar general” y que esta convocatoria es “la que más le ha sorprendido, porque todos los años puede haber algo que no esté en el temario que se estudia, pero este último examen te frustra”.
María José Lao, se quedó a dos puntos de obtener una plaza de Reparto y Agentes de clasificación en los anteriores exámenes de Correos. Desde junio, se dedica plenamente a opositar. A pesar de su desconcierto, no se viene abajo y asegura que “yo he dado lo mejor de mí y siempre no se puede ganar”. Si finalmente no consigue una plaza, seguirá opositando, aunque asegura que cambiaría de proceso: “opositaría para la Administración, bien para la Junta de Andalucía o bien para el Estado”.
Otro ejemplo es el de Soraya, de 34 años, más conocida por su perfil en Instagram @lacarteraguerrera, que asegura que “me parecieron unos exámenes difíciles y un poco retorcidas las preguntas”. Al igual que María José, aún no ha corregido el examen, “espero tener valor durante los próximos días”, indica Soraya, que explica que su sensación tras los exámenes de Correos “es rara”. Sin embargo, ella sí seguirá presentándose a convocatorias sucesivas de Correos: “si no es este año, porque en mi provincia hay muy pocas plazas, ¡será el que viene! Porque quiero entrar en esta empresa y no voy a dejar de luchar por mi sueño”. Soraya lleva trabajando en Correos desde 2017, y asegura estar “encantada. Es un trabajo que me llena y en el que disfruto mucho. ¡Los compañeros son maravillosos y hay muy buen ambiente!”, explica con optimismo.
Por su parte, Rafael Jaramillo, de 30 años, afirma que “hay una sensación generalizada de que ha sido un examen súper raro. Han preguntado preguntas muy raras y mucha legislación. Lo <<bueno>> es que todo el mundo está igual que yo”.
En colación a todo esto, Luis Ignacio Guillén Gil, autor y tutor del temario de Correos de Editorial MAD, asegura que “con la información que desde nuestra empresa le hemos facilitado a los opositores, estos podían responder 210 preguntas de las 220 que se han incluido en los exámenes de Correos. Mientras que Correos no haga la corrección, no se sabe nada y podría incluso declarar nulas algunas preguntas”.
Por lo que, quienes se han presentado a los exámenes de Correos, de momento, tendrán que esperar para saber lo que ocurre.
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