Pruebas Psicotécnicas para Oposiciones: ¿cómo afrontarlas?

Muchas oposiciones incluyen como parte de su proceso selectivo las pruebas psicotécnicas. Estas pruebas, conocidas coloquialmente como “los psicotécnicos”, son requeridas para especialidades tan dispares como Auxiliar Administrativo del Estado, Policía Nacional, Correos, Guardia Civil o múltiples categorías de Ayuntamientos, Diputaciones, Cabildos, etc.

Este tipo de prueba no mide conocimientos teóricos, sino destrezas y aptitudes que resultan necesarias para el puesto al que se opta. Su inclusión en las oposiciones resulta a veces un motivo de temor para los opositores a causa de su contenido y el limitado tiempo disponible para contestarlas.

Las pruebas psicotécnicas pueden resultar peliagudas; no por su dificultad intrínseca, sino porque para su preparación no sirve memorizar unos contenidos que luego se puedan exponer. Disponer de una buena cantidad de ejercicios, cuanto más diversos mejor, para practicar es muy importante, pero la clave es reconocer todos los tipos de psicotécnicos que pueden aparecer en el examen e interiorizar el razonamiento lógico aplicable a cada uno de ellos. A partir de ahí: ¡a entrenar!

Tipos de Pruebas Psicotécnicas

Las categorías más comunes de pruebas psicotécnicas que aparecen en los exámenes de oposiciones, cada una relacionada con una destreza determinada, son las siguientes:

1. Aptitudes Verbales

La capacidad de comprender y utilizar el lenguaje es una herramienta fundamental a la hora de ejercer un gran número de tareas. No sólo es importante conocer el medio (la palabra), sino también entenderlo en su contexto y contemplar todas sus posibilidades. Dominar la ortografía, aumentar el vocabulario y ejercitar la comprensión lectora y el razonamiento verbal son formas muy útiles de mejorarlas.

2. Aptitudes Numéricas

A la hora de trabajar con números, el cálculo es la base del razonamiento numérico. No es inusual que los ejercicios con cifras resulten amenazantes para los opositores; por esto, es importante que la preparación de esta parte sea sólida y continuada. Dominar operaciones básicas de cálculo mental es esencial para mantener la velocidad durante la prueba y asegurar el máximo de respuestas contestadas.

3. Atención, percepción y resistencia a la fatiga

Mantener la concentración durante todo el tiempo que duren las pruebas psicotécnicas es fundamental para no cometer fallos. Este tipo de ejercicios comprueban esa capacidad y la entrenan para que la capacidad de detección no se resienta durante el transcurso del examen.

4. Razonamiento Lógico – Abstracto

Localizar relaciones que no se aprecian a simple vista entre elementos simbólicos presentados en diferentes formatos es una competencia que permite medir el grado de desarrollo intelectual de un aspirante. Los ejercicios de figuras en serie son especialmente populares para trabajar este aspecto de las pruebas psicotécnicas.

5. Razonamiento Espacial

La capacidad de ordenar y estructurar objetos en el espacio pone en valor varias destrezas del opositor, como su atención, su percepción visual o sus dotes de orientación. Resulta muy útil practicar diferentes estrategias para acometer este tipo de prueba psicotécnica independientemente del formato en el que nos la encontremos.

6. Memoria

Las competencias retentivas suelen ser de las más analizadas en los exámenes psicotécnicos, ya que engloba la capacidad general del aspirante de absorber conocimiento y almacenarlo sin deterioro para su uso posterior. Como bien sabrás a estas alturas, toda oposición es un desafío para la memoria; pero es recomendable entrenarla de una determinada manera para poder resolver los ejercicios con rapidez.

¿Tienes pruebas psicotécnicas en tu oposición? ¿Qué tipo de ejercicio te resulta más costoso? ¿Cómo te los preparas?

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