Con motivo del Día Internacional de la Mujer y un año después de que MAD concediese diez becas a la Fundación Ana Bella para que tanto las supervivientes de violencia de género como sus hijos o hijas pudiesen prepararse unas oposiciones, la puerta de entrada a una plaza fija en el sector público, ambas entidades evalúan los resultados.
A través de las becas concedidas, se ha cubierto la preparación de oposiciones de los becados en diferentes ámbitos, desde el sanitario hasta el penitenciario pasando por el administrativo. “Desde MAD hemos brindado una orientación completamente personalizada a todos los usuarios de estas becas para que pudiesen elegir la oposición correcta y les estamos acompañando en todo el proceso. Existe mucho desconocimiento acerca de los procesos selectivos para poder acceder a una plaza de funcionario, y esta es la principal causa de que muchas personas ni siquiera se lo planteen como una salida laboral”, afirma Narciso Sánchez, Director General de MAD.
Además de todo el material necesario para la preparación de oposiciones, MAD ha incluido a las mujeres becadas en un programa de asesoramiento y de seguimiento, “para que puedan elegir la oposición que mejor les venga y no estén solas durante el proceso. Estamos a su lado. No todo el mundo conoce a fondo el ámbito de las oposiciones. Es un contexto desconocido para muchas personas: hay unos plazos, unos requisitos y unas plazas con más posibilidades de sacar que otras. Desde esta empresa no hemos hecho más que trasladar a nuestra Responsabilidad Social Corporativa lo que ya se viene desarrollando en las Administraciones Públicas, en las que hay reservadas plazas para mujeres víctimas de violencia de género en diferentes procesos selectivos para acceder al empleo público”, explica el Director General de MAD, Narciso Sánchez.
Por su parte, Noelia Palacios Prada, Técnica de Empleo de la Fundación Ana Bella, ha querido expresar su gratitud a MAD: “estamos agradecidos por su generosa iniciativa de becar a mujeres supervivientes de violencia de género y a sus hijos e hijas, brindándoles la oportunidad de opositar de forma gratuita. Esta colaboración representa mucho más que una ayuda económica; es una puerta hacia la independencia y el empoderamiento, permitiéndoles acceder a una formación de calidad y avanzar hacia un futuro estable y digno. Gracias a su compromiso y sensibilidad, muchas mujeres podrán transformar sus vidas y las de sus familias, rompiendo el ciclo de la violencia a través del empleo y la educación. Valoramos profundamente el esfuerzo y la dedicación de MAD en facilitar herramientas que promuevan la igualdad de oportunidades. Su apoyo es un reflejo del impacto positivo que puede lograrse cuando el sector educativo y el social trabajan juntos por una causa común. Reiteramos nuestro agradecimiento y esperamos seguir colaborando en el futuro para seguir generando cambios reales en la vida de tantas mujeres valientes”.
Una de las supervivientes que está actualmente disfrutando de esta beca es María del Carmen Estévez Jabalera, que está opositando a celadora del SAS: “esta oportunidad representa para mí un gran apoyo y un impulso significativo en mi camino hacia el logro de mi objetivo profesional. Aprecio profundamente la confianza depositada en mí y el esfuerzo para facilitar el acceso a la formación a quienes, como yo, aspiramos a formar parte del ámbito sanitario. Gracias a esta beca, puedo continuar con mi preparación con mayor tranquilidad y dedicación, lo que sin duda se reflejará en mi rendimiento y compromiso”.
Otro usuario es Tairo Muñoz, hijo de una superviviente: “no tuve la oportunidad de estudiar debido al maltrato en mi familia y gracias a Editorial MAD he podido optar por sacarme una oposición para tener un trabajo que me garantice salir adelante por mí mismo y para mi familia, ya que pronto seré padre. Gracias por vuestra ayuda, por vuestro seguimiento y orientación que me han ayudado cuando yo me quería rendir. Me habéis animado a seguir. No es sólo una empresa que te prepara para las oposiciones, es una forma de cambiar vidas para personas que hemos tenido menos oportunidades en la vida”.
Cabe recordar que la Fundación Ana Bella cuenta con una red en 88 países, en los que presta apoyo y atención a mujeres en situación de exclusión. En España, 44.000 mujeres que han padecido una situación de violencia de género han roto su silencio gracias a este organismo.
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