Con el auge de las técnicas de estudio y memorización estamos viendo cómo crece, al mismo tiempo, la cantidad de personas que no creen en ellas, que opinan que aprender a usarlas es una pérdida de tiempo. Y opinan lo mismo de ver vídeoclases, tutoriales, podcast, esquemas o cualquier otro recurso asociado a un contenido que haya sido diseñado para facilitar el estudio y memorización. Si tú también los ves, te rodean y los sufres, te vamos a enseñar porqué se equivocan y porqué debes ignorar sus recomendaciones. Sigue leyendo y descubre cómo marcar la diferencia en tu oposición gracias a la Pirámide de Aprendizaje.
¿Qué es la Pirámide de Aprendizaje?
Sabemos que el aprendizaje es un proceso complejo que se desarrolla de forma diferente para cada persona. Sin embargo, hay unas bases comunes a todos, como son la concentración, la implicación, la memoria o los sentidos que hacen que sea objeto de estudio. Vamos a ver en qué consiste la Pirámide de Aprendizaje.
Estos procesos de aprendizaje se han estudiado muchas veces, desde muchos puntos de vista diferentes y poniendo el énfasis en distintos aspectos del proceso.
Cody Blair, pedagogo estadounidense, estudió durante años cómo se produce el aprendizaje para conocer lo que cada recurso y actividad aporta al estudio y hasta dónde llega su potencial.
Analizó los procesos de aprendizaje y llegó a la conclusión de que la acción era la clave. Su conocida Pirámide de Aprendizaje es la representación gráfica de que la participación activa de las personas al procesar la información es lo que hace que una técnica de estudio sea efectiva a no.
Según este pedagogo, existe una jerarquía entre las diferentes tareas que podemos realizar para aprender y los recursos que usamos para ello, de tal forma que unas aportan más que otras en el global de todo lo que se aprende.
En su pirámide podemos ver representado el nivel de memorización que nos aporta cada actividad, cada técnica. Desde escuchar una charla, hasta dar una explicación, cada actividad permite retener una cantidad de información.
¿Qué aporta?
Aunque esta teoría está hoy en día en desuso, ya que presenta algunas carencias (como no establecer diferencias personales), la Pirámide de Aprendizaje sigue mostrando algunos aspectos de gran importancia para los procesos de aprendizaje:
- El valor de la acción y la implicación para poner a funcionar el cerebro.
- La comprensión de la información como paso previo a una auténtica memorización a largo plazo.
- La practicidad y el dinamismo en el estudio mantiene la motivación, que es motor de trabajo diario de cualquier persona opositora.
- La variedad es un valor fundamental en cualquier proceso de estudio. La importancia de disponer de recursos diferentes para registrar los datos de la forma más adaptada posible a nuestro tipo de memoria.
- Sólo puede explicar un concepto o un procedimiento bien, quien lo conoce, quien lo domina, por eso lo que más potencia el aprendizaje, es enseñar.
Niveles de aprendizaje y recursos
Vamos a ver algunos de los recursos están en cada nivel de la pirámide:
Todos somos diferentes y esta teoría no tiene esas diferencias en cuenta, por eso te proponemos que elabores recursos de aprendizaje y memorización adaptados a ti, a tus necesidades y preferencias, que innoves y pruebes nuevas técnicas, y que sigas nuestros consejos y tips, para sacar todo el rendimiento a tu dedicación y esfuerzo. Recuerda: todo suma. Es decir, que adaptes la teoría de la Pirámide de Aprendizaje a ti mismo.
Y a los que te digan que lo que haces no sirve para nada, que tu técnica de estudio no vale, que es una pérdida de tiempo escuchar un podcast o ver una vídeoclase, pásale este post y no inviertas tu tiempo en convencerle.
Cuéntanos qué técnicas usas tú para preparar tu oposición. Te escuchamos.
