El docente de primaria Toni García es el ganador el Global Teacher Award 2021, un reconocimiento equiparable al premio Nobel de la Enseñanza. No es el primer premio que recibe este maestro a lo largo de su carrera: ya en 2018 obtuvo el premio estatal al mejor docente de primaria. Unos 8.000 profesores de hasta 111 países estaban nominados a recibir este premio, que normalmente se otorga en India. “Es un reconocimiento fantástico. Estoy muy feliz. La pena es que como consecuencia de la pandemia este año la celebración será telemática”, indica el reconocido maestro.
Para recibir este galardón, la organización “tiene en cuenta los proyectos de innovación, los proyectos de investigación y de las publicaciones que has realizado”, explica Toni García para Mundopositor. Un detalle curioso es que el premiado desconoce aún quién le nominó, ya que una persona puede nominarse a sí misma o nominar a alguien que considere que merece este premio. “Alguien que posiblemente esté entre mis seguidores de redes sociales decidió poner mi nombre. El premio tiene parte de ellos también, porque hacen una labor de difusión de lo que tú haces que hay que reconocer. Para mí son mis compañeros”, cuenta emocionado.
Su trayectoria
Aunque ya hemos mencionado sus dos reconocimientos más importantes, no son los únicos que ha recibido Toni García: “en los últimos años ya llevo una serie de premios muy importantes. En el 2018 me dieron el premio al mejor docente de España de Primaria y he recibido algún galardón más como personaje del año aquí en la región de Murcia. También en mi tierra me dieron varios premios a la cultura… Llevo bastantes reconocimientos acumulados. Eso es muy gratificante porque son 27 años dedicados a esta profesión por un lado como trabajo y por otro lado como hobby. Uno es maestro casi las 24 horas del día”.
Tal es la pasión que transmite Toni García cuando habla de su profesión, que quien lo escucha puede intuir por qué este docente es tan reconocido: “lo que más me satisface de todos estos premios es que puedo poner una imagen de éxito del docente al resto del mundo y poner la Educación en primera plana. Es importante que se vea que hay docentes que trabajamos mucho y que nos implicamos mucho. El éxito es eso: la implicación diaria, la pasión diaria. Es una profesión donde también hay mucho desgaste y tienes que tener una motivación muy elevada porque hay muchas cosas en contra que te hacen perder precisamente esa motivación y yo creo que el éxito mío ha sido precisamente eso: implicarme al cien por cien, intentar llegar a todos los alumnos y principalmente atender a las necesidades de cada uno de ellos, que son al fin y al cabo los que van a disfrutar de esa calidad que yo les pueda dar, de ese éxito que yo pueda lograr. Esa es la clave”.
Vocación de maestro
Tal y como recuerda Toni García, la vocación de maestro vivía latente en él, pero no la tenía tan clara durante su adolescencia: “con 17 y 18 años tenía vocación de todo. Creo que es una edad muy mala para tener que elegir lo que vas a hacer el resto de tu vida. Es complicado. A mí me gustaba la arquitectura, quería ser policía, bombero, astronauta, todo. Empecé a estudiar Económicas porque me gustaba mucho el mundo de la bolsa y de la inversión. La formación estaba enfocada a ser el contable de una empresa y yo no quería eso, así que dejé abandonada esa carrera y como ya desde siempre todo el mundo me decía que tenía unas cualidades muy buenas para ser profesor decidí estudiar Magisterio”.
Sin embargo, aunque él no lo supiera, eran tales las cualidades que Toni García tenía como docente, que en su Galicia natal más de uno le animaba a serlo: “desde adolescente iba rodeado de niños por todas partes y todo el mundo me decía: <<tú tienes que estudiar Magisterio>>. Fue pisar la facultad y ya el primer día descubrí que aquella era realmente una de mis vocaciones. Lo que se puede transformar el mundo desde la Educación me parece tan fascinante que desde ese momento quedé enganchado”, recuerda. Al conocido maestro afincado en Murcia se le llena la boca cuando habla de su profesión: “yo soy un apasionado de la Educación. Me encanta mi profesión y lo que más me gusta es cuando veo cómo los alumnos van desarrollando las capacidades que ellos tienen, cómo las van reconociendo y cómo las van explotando”, explica Toni García.
Toni García, un opositor constante
Este docente de éxito fue opositor en su día: “yo tenía claro cuando salí de la carrera en Santiago de Compostela que quería trabajar como maestro. No había muchas salidas en centros privados o concertados y en cuanto a lo público, estaban congeladas las oposiciones por una denuncia que había habido de interinos. Nada más salir de la carrera yo quería trabajar de profesor, quería ser maestro. Busqué dentro de las comunidades autónomas cuál era la que mayor número de plazas tenía de mi especialidad en ese momento y que además tuviera mar. Entonces me vine directamente a la región de Murcia”, cuenta Toni García, que tenía muy claro que quería obtener una plaza: “mi idea sobre sacar las oposiciones era sobre todo para tener una cierta estabilidad, porque, aunque en la escuela privada puedes trabajar con tu contrato indefinido, la estabilidad que te da poder opositar y conseguir una plaza fija definitiva no la tienes en esta y eso garantiza un poco más que tú te puedas dedicar al cien por cien a tu profesión sin preocuparte de qué pasará con mi plaza, si me la quitan, si no me la quitan, si perdemos alumnos… Yo quería tener esa estabilidad para trabajar al cien por cien y que mi única preocupación fueran los alumnos”, afirma. A día de hoy, Toni García reconoce estar contento con esta decisión, aunque le costó conseguir su plaza: “la clave es la constancia de todo éxito en la vida y estoy muy muy contento de la decisión que tomé”, explica.
Formación autónoma
Suena paradójico que este recién nombrado mejor profesor del mundo apostara por la autoformación en sus oposiciones: “Jamás quise ir a una academia. Me gusta mucho la formación, me viene de herencia. A mi padre le encantaba autoformarse. Descubrí el manual de Editorial MAD de Educación Primaria y me pareció perfecto. Era genial. Muy completo, bastante atractivo y muy sencillo. Además, hubo en ese momento un cambio de normativa y la propia plataforma de la Editorial MAD ofrecía gratuitamente los temas nuevos que habían salido en esa convocatoria, con lo cual más profesionalidad no se podía pedir. Me presenté varias veces sin conseguir plaza hasta que la logré con mi temario de Editorial MAD, que aún tengo en casa”.
Tal fue la satisfacción de Toni García con dicha editorial, que decidió escribir dos libros para la misma: “Hacia una nueva educación” y “118 recursos TIC básicos y gratuitos para el docente”, el primero de ellos con especial éxito. “Los escribí desde el agradecimiento porque ya Editorial MAD forma parte de mi para siempre”, indica.
La Educación, asignatura pendiente
Para Toni García, lo que se enseña en los colegios va mucho más allá: “la escuela tiene que educar en las asignaturas porque es fundamental que los alumnos tengan conocimientos, porque esa es la base del aprendizaje, pero también estamos para mejorar esta sociedad desde el futuro. La educación es lo único que nos puede salvar y convertir el mundo en un mundo mejor”, afirma.
En esta línea, el docente pone los países nórdicos como el ejemplo que debemos seguir: “las sociedades más avanzadas son las sociedades más cultas y las sociedades donde la Educación tiene mucha importancia. En España la Educación no es importante. Creo que la base de un cambio social y diría que hasta económico es mejorar en la Educación que están recibiendo nuestros alumnos”, expresa Toni García de forma contundente.
Un ejemplo como docente, pero también como opositor, y sobre todo, como persona.
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